"Las historias para niños deben escribirse con palabras muy sencillas, porque los niños, al ser pequeños, saben muy pocas palabras y no las quieren muy complicadas. Me gustaría saber escribir esas historias". (Saramago)
Un cuento que desprende valores como la generosidad, el amor a la naturaleza y la perseverancia que narra la historia de un niño que vive en el campo y al que lo que más le gusta es pasear y observar todo lo que ocurre a su alrededor. Un buen día paseando se aleja sin darse cuenta y en su camino se encuentra una flor triste y marchita. Decide cuidarla y mimarla hasta que después de mucho esfuerzo la planta logra renacer y florecer. Cuando esto sucede el niño se queda dormidito junto a su querida planta. Sus padres están preocupados y lo buscan sin parar hasta que lo encuentran acurrucado junto a la flor, que durante el tiempo en que ha sentido el cariño y el calor del niño ha crecido llegando a ser la flor más grande del mundo.
Os dejo con este vídeo realizado con la técnica cinematográfica del stop-motion (animación en plastilina), dirigido por Juan Pablo Etcheverry, narrado por el propio José Saramago y con la música de Emilio Aragón.
Y esta es la portada del cuento, ilustrado por Diego Mallo:
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